PROGRAMA VOCAR

Científicos locales disertaron para alumnos de escuelas técnicas

La actividad, que busca estimular a los jóvenes en el estudio por las ciencias, convocó al último año de todos los colegios de la región


Estudiantes de escuelas técnicas durante la charla. Fotos: CONICET
Estudiantes de escuelas técnicas durante la charla. Fotos: CONICET
Estudiantes de escuelas técnicas durante la charla. Fotos: CONICET

Hacer lo que les guste, pero hacerlo bien fue la premisa que guió la charla para alumnos de escuelas técnicas que dos investigadores científicos brindaron en la sede del CONICET La Plata en el marco del Programa de Promociones Científicas (VocAr) que el organismo impulsa a nivel nacional. La actividad, que no cuenta con antecedentes en la ciudad, estuvo dirigida a los estudiantes del último año de secundaria de todas las escuelas de educación técnica de la región, que suman 16 entre La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena y Punta Indio.

Los disertantes fueron Omar Azzaroni, del Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas (INIFTA, CONICET-UNLP) y Alberto Lencina, del Centro de Investigaciones Ópticas (CIOp, CONICET-CIC), doctores en Química y en Física, respectivamente. Durante la presentación, que se brindó en dos turnos -por la mañana y por la tarde- para respetar la escolaridad de los destinatarios, los científicos les contaron cuáles son y en qué consiste cada peldaño de la etapa formativa, comenzando con el título de técnicos con que los alumnos egresarán dentro de pocos días.

“En el mercado laboral, existen tareas muy diversas, para las cuales a veces sirve ser técnico, otras, licenciado, y en otras ocasiones, vale más el título de doctor. En la química, la física y las ingenierías hay un déficit de personal, así que son profesiones con una gran demanda laboral”, subrayó Azzaroni, quien reconoció sentirse muy identificado con el público teniendo en cuenta que él también pasó por la educación técnica. En ese sentido, compartió su trayectoria personal al tiempo que brindó información acerca del sistema de becas que otorga el CONICET y que permite a los aspirantes dedicarse de lleno a su formación de posgrado.

Por su parte, Lencina coincidió en que “cuando el Estado te paga por estudiar, quiere decir que lo que estás haciendo, vale la pena y el sacrificio”. El experto contó a los chicos en qué consiste su trabajo actual en el campo de la óptica y los rayos láser, al tiempo que contextualizó con datos del presente el enorme impacto de estos temas en la vida cotidiana. Luego, a través de curiosas experiencias prácticas, combinó su realidad de investigador científico con su otra faceta como disc jockey, actividad que hoy realiza como hobby, pero que supo ser una salida laboral durante toda su etapa como estudiante universitario.

Así, deleitó a los jóvenes con experimentos de luces y sonido para demostrar la conducción a través de fibra óptica. “Yo hago investigación básica, que puede parece muy alejada de lo cotidiano, pero que es imprescindible para la aplicación en desarrollos tecnológicos concretos, que en definitiva buscan mejorar la vida de todos”, expresó Lencina. El científico enfatizó también la existencia de “grandes oportunidades de trabajo tanto en el ámbito industrial como en el académico”, y destacó a La Plata como una ciudad con enorme densidad de científicos por habitante. “Están en el supermercado, en el micro, en todos lados, disfrazados de gente normal”, bromeó.

Para terminar, ambos investigadores hicieron especial hincapié en la necesidad de dedicarse a lo que uno le gusta “con verdadera pasión y compromiso, ya que sólo de esa manera es posible hacerlo bien”. En esta línea, aprovecharon para recordar a los jóvenes la importancia de desarrollar otras aptitudes además de la disciplina elegida, como hablar en público, escribir correctamente, ser tolerante para trabajar en equipo y liderar grupos, indagar en las distintas opciones de estudio, y “nunca dejar de capacitarse, para desempeñarse de manera idónea, sin improvisar”.